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 Para aquellos que su trabajo requiere estar más de ocho horas sentados, sin tener la oportunidad de tomarse unos minutos para dar unos cuantos pasos y estirarse, además de ser estresante, afecta la espalda, cuello, circulación, y estudios advierten que este hábito aumenta el riesgo de enfermedades crónicas, aunque existen formas de mitigar sus efectos.
Pasar horas y horas sentado frente a una pantalla ha pasado de ser un hábito común a convertirse en una amenaza seria para la salud. Doctores que han hecho estudios recientes sobre los afectos de una vida laboral sedentaria, el permanecer en la misma posición durante periodos prolongados afecta más que solo la postura ¿Sabías que acelera el envejecimiento prematuro? La biomecánica Katy Bowman, autora del libro My Perfect Movement Plan, "el tiempo prolongado sentado en una silla está haciéndonos envejecer más rápido", por todos los impactos negativos a la salud, que incluso afecta hasta la metabólica. Estar mucho tiempo sentado envejece
Un estudio de la American Heart Association respalda estas afirmaciones al señalar que estar sentado más de diez horas al día, incrementa el riesgo de enfermedades cardíacas y reduce la esperanza de vida, incluso en personas que cumplen con las pautas de actividad física. El riesgo que supone este estilo de vida sedentario, hasta ha sido comparado por algunos especialistas con los efectos de fumar, pues ambos hábitos impactan gravemente la salud en general. Comparado con los años 70s, los trabajadores de hoy queman 100 calorías menos al día, un déficit que desde luego se refleja en el estilo de vida actual, en el que gran parte de las actividades se realizan frente a una pantalla. En otros contenidos hemos mencionado sobre las repercusiones en el bienestar mental, por que el pasar largas horas sin moverse reduce la actividad de los grandes músculos de las piernas, disminuyendo la producción de sustancias químicas cerebrales que regulan el ánimo, lo que puede derivar en síntomas de ansiedad y depresión.
Sin embargo, podemos revertir estos efectos con los tips que mencionábamos al principio como reducir el tiempo sentado y realizar movimientos frecuentes, esto mejora tanto la concentración como el estado de ánimo, particularmente en quienes realizan actividades cognitivas intensas. Se recomiendan incorporar movimiento en la rutina diaria como al menos 150 minutos de actividad moderada semanal, aunque aquellos con jornadas sedentarias podrían necesitar hasta el triple. Alternativas de breves estiramientos, caminar cada 30 minutos o utilizar escritorios que se elevan, ayudan a activar la circulación y reducir el desgaste físico y mental de estar sentado. Fuentes: |
